GORDI ha cruzado el arcoíris
Aquí os mostramos una vez más la dura realidad de los finales de algunos de los animales abandonados en la protectora. Mucha gente piensa que al abandonarlos en una protectora ya están a salvo… GRAN ERROR, para muchos supone una condena a muerte por enfermedades bacterianas y víricas debido a la dureza del día a día en el refugio.
Este ha sido el trágico final de Gordi, que nos dejaba hace unos días por una pericarditis, la membrana de alrededor de su corazón se llenó de líquido Y fue segando su vida poco a poco sin que nos diéramos cuenta, pues no es una enfermedad con una sintomatología externa clara. Para cuando vimos que no estaba bien ya era demasiado tarde. El final de Gordi no ha sido como el de sus hermanos, Látigo que ya está adoptado y Trufo que actualmente está en una casa de acogida donde está de maravilla. Gordi se quedó solito en el refugio tras la marcha de sus 2 hermanos, de los cuales no se había separado desde que nacieron. Se le veía todos los días muy triste y pese al esfuerzo de los voluntarios por hacerle compañía su estado anémico no mejoró en sus últimos días de vida. Para muchos de nuestros animales el día a día es muy duro cuando ven a sus hermanos o compañeros de chenil marchar.
Finalmente su elevadísima fiebre, su hiperventilación y sus avanzados síntomas de estado cianótico derivados de una grave pericarditis le vencieron la batalla, y hubo que tomar la decisión dura de dejarlo marchar para que no sufriera más. Ahora nos queda el consuelo de que ha dejado de sufrir, sufrimiento muy injusto para su corta edad pues no le ha dado tiempo a vivir apenas. Aún guardamos la esperanza de algún día dejar de escribir este tipo de finales, por ello nos esforzaremos más aún para concienciar a la gente de la esterilización para evitar la camadas indeseadas abandonadas como ha sido el caso de estos 3 hermanitos.
Corre y vuela libre allí arriba sin dolor pequeño Gordi y sobre todo cuida de tus dos hermanos para que conozcan la vida que tú no has tenido la oportunidad de conocer.
Descansa por siempre Gordi…