Nuestro gran luchador Glück al fin se encuentra felizmente adoptado. Este grandullón ha luchado con uñas y dientes pues ha tenido que recuperarse de dos operaciones, la primera de cadera y más tarde tuvo la mala suerte de romperse una pata. Pero lo más importante es que gracias a su estupenda casa de acogida pudo recuperarse completamente para emprender rumbo a su nuevo destino con una familia alemana.

Su llegada fue estupenda pues se mostró cariñoso en todo momento y más con las chuches que le llevo su nueva mami, también se integró enseguida con sus nuevos hermanos caninos. Por fin Glück va a ser feliz en una familia de verdad y para siempre donde no lo volverán a abandonar con una cadera rota.